En las faldas del mítico Moncayo encontrarás la localidad de Vera de Moncayo. Dada su condición de territorio fronterizo, todavía se conservan los restos de su antiguo castillo.
Su iglesia parroquial es de mediados del siglo XVI y en su interior guarda el retablo mayor procedente de la capilla de San Bernardo del Monasterio de Veruela.
A un kilómetro del casco urbano se levanta majestuoso el monasterio cisterciense de Veruela. Una magnífica obra del siglo XII de delicada belleza desde el que Gustavo Adolfo Bécquer escribió su obra “Desde mi celda”.
Dentro del recinto monástico podrás visitar, además del Espacio Bécquer –dedicado a la estancia del poeta y su hermano, el pintor Valeriano, entre 1863 y 1864-, el Museo del Vino de la Denominación de Origen del Campo de Borja.
Por otra parte, en un promontorio situado frente al monasterio se hallan los restos arqueológicos del poblado celtíbero de La Oruña. Y no olvides que desde Vera podrás acceder rápidamente al Parque Natural del Moncayo.
El pueblo de Vera de Moncayo donde se encuentra situada nuestra casa dispone de
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Piscinas municipales
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Pista de fútbol sala
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Parque infantil
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Restaurantes
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Cafeterías
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2 Entidades Bancarias con cajero
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Panadería
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Carnicería
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Tiendas de comida y productos de limpieza
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Floristería
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Farmacia
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Peluquería
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Centro de estética.
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Bodega de vino,
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Centro de interpretación celtíbero
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Museo del vino de la denominación del campo de Borja.
El Moncayo, venerado desde época pasadas, es uno de los espacios naturales más importantes de Aragón. Reúne una gran diversidad de ambientes, desde zonas extremadamente secas a exuberantes hayedos y bosques. Estos ecosistemas sirven de hábitat a una nutrida fauna, como jabalíes, corzos, tejones, águila real y otras rapaces.
Tarazona, San Martín de la Virgen del Moncayo o el monasterio cisterciense de Veruela constituyen los principales puntos de acceso al Parque Natural desde Aragón.
Tanto el parque como sus alrededores ofrecen una amplia red de senderos. Uno de ellos parte de Agramonte, ofreciendo una subida a la cima del Moncayo. De Tarazona parte también un sendero con destino al santuario de la Virgen del Moncayo, aunque te proponemos realizar en coche el recorrido comprendido entre Tarazona y Agramonte y, a partir de aquí, a pie.
Y si por algo destaca también el Moncayo es por su riqueza micológica. Los hongos sirven como fuente de alimento para gran variedad de animales, pero también son un recurso cada vez más apreciado en la alta gastronomía.
Texto tomados de Turismo de Aragón https://www.turismodearagon.com